Kristen Stewart es una estrella de Hollywood, pero también es muy particular. La joven protagonista de Crepúsculo y novia de Robert Pattinson está más obsesionada por ser buena actriz que por su circunstancia de haber alcanzadado el estrellato. Las estrellas ya se sabe que actúan permanentemente de cara a la galería. Stewart, no.La actirz protagoniza este mes la portada de Vanity Fair, convirtiéndose en la tercera actriz joven que es portada de una revista femenina en el arranque del verano. Obviamente no es una casualidad. Las jóvenes no leen revistas femeninas en papel. Prefieren Internet. De esa manera las publicaciones se han lanzado a la caza y captura de estrellas jóvenes. Selena Gomez en Cosmopolitan, Demi Lovato en Elle y Kristen Stewart en Vanity.
En el caso de esta última el pretexto es que ha protagonizado, con gran éxito de público, Blanca Nieves y el Cazador que hace una semana lideraba la taquilla de EE.UU con casi 100 millones de dólares.
Ella, por supuesto, posó para las fotos, pero también tenía mucho que decir. La actriz reconoce que ella sabe que es criticado por cómo se ve en las fotos… pero que no le importa. La actriz asegura que está orgullosa de verse perfecta en las fotos y que lo ve positivo porque es ella misma.
Para su novio lo que existe en torno a su chica es consecuencia de que los medios y la gente ya tienen una idea preconcebida de cómo es Kristen “las personas han decidido cómo van a percibirla. No importa cuántas veces sonríe, que siempre pondrán la foto donde ella no está sonriendo.”
Para Kristen lo que sucede es que no quiere que la gente la vea como alguien que siempre está interpretando un papel.
“Me han criticado mucho por no ofrecer una iumagen perfecta en cada fotografía. Pero no me avergüenzo de ello. Pero si ofreciera una imagen perfecta todo el tiempo, la gente podría pensar: ¿Qué actriz! ¡Qué farsante! Ese pensamiento me avergüenza tanto que prefiero salir muy seria en la mitad de mis fotos. Lo que me importa es que la gente me vea como honesta.”
